Programa diseñado por Perla Montelongo, Roberto Cárdenas y Claudia Hidalgo.
Chillax Garden
Este invento fue un poco desastre, para qué les voy a mentir. Pero nos divertimos mucho. Imaginamos un jardín idílico con sistemas de riego automático, un huerto de yerbas comestibles y áreas de descanso.
Suena bien, pero: a) estamos ubicados en medio del desierto, y b) no teníamos idea de plantas o cultivo.
Sin embargo, en Casa de Inventos probamos cada idea que surge. Así que, les presentamos con orgullo ¡Chillax Garden!
Transformamos un espacio vacío con grafitis, macetas hechas a mano, un jardín vertical que nos recordó a la película "El cienpiés humano", y con muebles hechos a mano. Queríamos crear un espacio donde los y las estudiantes pudieran conversar, jugar, estudiar y comer en grupo. ¿Y saben qué? ¡Funcionó!
Un agradecimiento especial a la gente experta que nos guió en cada paso: Irving Prieto, Nómada Laboratorio Urbano, Yorch, Israel Gómez Mares y Mary Gómez.
Primero, fuimos al jardín botánico para conseguir algunas plantas.
Luego hicimos un primer intento en un jardín vertical.
Muy felices y todo, pero no funcionó y las plantas murieron, así que tuvimos que llamar a una experta para que nos ayudara a reconstruirlo. ¡Gracias, Mary Gómez!
¡Ahí vamos otra vez... segundo intento!
Llamamos a Irving Prieto, un experto en agricultura, para que nos enseñara los conceptos básicos de cultivar plantas y asegurarnos de que esta vez las mantuviéramos con vida.
Siguiente paso: hacer muebles para exteriores. Debían funcionar como una mesa, área de estudio, arena de juego de ajedrez y proporcionar sombra.
¡Mil gracias Nómada Laboratorio Urbano por el taller!
Ahora a agregar color para darle vida a nuestro jardín.
Para esta tarea, llamamos a nuestro amigo Yorch, quien nos enseñó cómo trabajar con grafiti y stencil.
Los/as estudiantes representaron en el mural los posibles usos de este espacio: escuchar música, jugar ajedrez y comer.
¡La pared está lista! ahora vamos a 'pimpear' los muebles.
Finalmente, cerramos este reto revisando nuestros logros y errores, gustos, disgustos e ideas para el futuro.
Tip: imprimimos fotos del proceso, creamos una línea de tiempo y pedimos a los/as participantes que escriban sus comentarios directamente en el pizarrón: lo que aprendieron, lo que les gustó y no les gustó. ¡Este método de evalaución funciona de maravilla!