Definitivamente uno de nuestros días favoritos fue esta tarde de ciclismo a lo largo del Río Bravo. Con nuestras bicicletas recién reparadas por nosotros/as, rodamos hacia el "Parque Extremo" donde pusimos a prueba nuestras habilidades en bicicleta y nuestra resistencia.

Iniciamos el viaje en bicicleta durante varios kilómetros a lo largo de la frontera México-USA, después hicimos una parada recargar energías con un picnic y finalmente llegamos al parque. La sensación de libertad al regresar en bicicleta nos llenó por completo. Son momentos como estos, compartiendo desafíos y comida juntos, los que nos recuerdan el valor de la familia de Casa de Inventos.